Un bosu es una herramienta de entrenamiento que consiste en una semiesfera de goma conectada a una base plana. Es utilizado para diversos ejercicios físicos y actividades deportivas. Su diseño ofrece una plataforma inestable que desafía al cuerpo a mantener el equilibrio y la estabilidad durante el movimiento o acciones sobre él. Tiene diferentes funciones y aplicaciones sobre la mejora de la coordinación y el equilibrio.

Es popular en todo lo relacionado con el deporte, estudios de fitness y programas de rehabilitación debido a su versatilidad y capacidad para adaptarse a diferentes niveles de condición física, siendo un objeto ampliamente utilizado en las actividades físicas y deportivas, gimnasios y centros deportivos.

Objetivos del entrenamiento con bosu

Los objetivos principales a la hora del trabajo con bosu se pueden resumir a continuación.

  • Mejora del sistema propioceptivo
  • Mejora de la fuerza a niveles estructurales y neurológicos
  • Aumenta capacidad de absorción de fuerzas a nivel articular y musculo-tendinoso.
  • Mejora estabilidad y equilibrio

Como podemos ver una correcta utilización de este elemento adaptándose al momento y objetivos del sujeto puede otorgarnos unos buenos beneficios sobre todo a nivel propioceptivo y de control motor.

¿Cuándo es no recomendable usar el bosu?

Al igual que para ciertos objetivos es una herramienta beneficiosa de utilización, también encontramos ciertos aspectos en los que no es necesaria su utilización. De ahí la gran controversia que existe en el mundo del fitness y el entrenamiento sobre su utilización. Redactaremos a continuación algunos de esos motivos.

El primero de ellos, es exceder la inestabilidad y no ser adaptativo para ese sujeto. Destacamos como dentro de la utilización de esta plataforma inestable, normalmente van a ser los puntos de contacto corporales con ella los que van a darnos esa inestabilidad que hablamos.

Sí el sujeto presenta por lesión o falta de balance entre una o varias articulaciones, con las consiguientes adaptaciones posturales, propioceptivas y articulares se puede encontrar una inestabilidad ‘’interna’’ de dicho sujeto que le haga ser ya inestable de por sí. Es por ello que será PERJUDICIAL si encima le añadimos un elemento inestable como el bosu.

En este caso, hemos de prestar atención a la adaptación del sujeto durante el ejercicio, detectando sus respuestas a nivel interno viendo las partes de su cuerpo donde se encuentra su inestabilidad. Por ello, es fundamental adaptar la dificultad y el grado de inestabilidad a las condiciones del sujeto, ya que no por aumentar la dificultad e inestabilidad va a resultar en un mayor efecto positivo en los resultados obtenidos.

El segundo motivo por el que no utilizarlo es por su falta de transferencia al gesto deportivo o acciones que realicemos normalmente. Es debido a que tanto en acciones de nuestro día a día como en la gran mayoría de los deportes la superficie de contacto es estable y no fluctúa como si ocurre si trabajamos con este elemento inestable.

Por último, si queremos trabajar el aumento de niveles de fuerza con ejercicios a altos niveles de nuestro RM y encontrando una inestabilidad alta como nos puede proporcionar el bosu, nos impedirá el llegar a dichos niveles de trabajo de fuerza que comparándolo con situaciones en superficies estables.  

Aplicaciones del uso del bosu

Podemos encontrar como su aplicación es utilizada en mayor medida para la mejora de la propiocepción y control motor.

El trabajo con el bosu mejora el control motor al desafiar al cuerpo a adaptarse a una superficie inestable. Durante los ejercicios con el bosu, los músculos estabilizadores se activan para mantener el equilibrio y la estabilidad, lo que requiere una coordinación precisa entre diferentes grupos musculares.

Este tipo de entrenamiento estimula el sistema nervioso, promoviendo conexiones más eficientes entre el cerebro y los músculos. Con el tiempo y la práctica constante, el cuerpo mejora su capacidad para realizar movimientos coordinados y controlados en situaciones tanto estables como inestables.

Como resultado, el trabajo con el bosu puede ayudar a mejorar la precisión, la fluidez y la eficiencia en la ejecución de movimientos tanto en el ámbito deportivo como en las actividades cotidianas.

Además, se encuentra utilizado en el campo de la readaptación y prevención de lesiones, debido a su gran beneficio en la absorción de fuerzas a nivel articular y recuperación propioceptiva perdida tras lesión.

Sobre todo, destacar como dentro de la readaptación no introducir el bosu hasta que se hayan recuperados niveles propioceptivos y de control motor adecuados para la introducción de estímulo de trabajo con este elemento.

Una vez esos niveles estén correctos el bosu será una herramienta más a utilizar con buenos beneficios sobre el proceso de readaptación de los individuos. 

Como resumen, podemos indicar que la utilización del bosu es beneficiosa en función del objetivo que pretendamos, el momento que se utilice y las características del propio sujeto ante trabajos de inestabilidad. Obtenemos mejoras y beneficios considerables en aspectos propioceptivos y de control motor con su aplicación. Por último, recuerda que en Élite Málaga nuestros entrenadores podrán asesorarte y prescribirte el mejor entrenamiento según tus objetivos y necesidades. Puedes contactar con nosotros a través de WhatsApp 656501317 o a través del formulario de contacto.