En esta nueva entrada del blog vamos a centrarnos en el entrenamiento de fuerza en adolescentes. Desde Élite Málaga nos gustaría desmentir algunos mitos que se han creado alrededor del entrenamiento con adolescentes y, sobre todo, con el entrenamiento de la fuerza. Además, nos resulta imprescindible informar sobre la multitud de beneficios que tienen para que, tantos los padres como los propios jóvenes, se sientan completamente seguros realizando este tipo de entrenamientos.

Las últimas investigaciones científicas han demostrado que el entreno de fuerza, bajo la supervisión de profesionales licenciados en Ciencias De La Actividad Física y Del Deporte, es una herramienta esencial para estimular adaptaciones positivas en los niños de ambos sexos. (Faigenbaum,et al 1996)

¿Cuál seria la edad perfecta para empezar este iniciarse en este tiempo de entrenamiento?

Desde los 6 años de edad, la mayoría de los niños y niñas están preparados para el ejercicio de fuerza, depende del nivel madurativo de cada caso. Si bien es cierto que, a estas edades tan tempranas, no repercute tanto el ejercicio en la ganancia muscular, pero se suelen dar unas adaptaciones neuronales significativas, tanto en coordinación como en reclutamiento de fibras motoras.

¿Qué tipo de material es más aconsejable para estos entrenos?

Existe una amplia variedad de materiales aptos, como pueden ser las mancuernas, barras olímpicas, pesos rusos, gomas, sistemas inerciales de entrenamiento, balones medicinales, etc. No hay una diferenciación de materiales en cuanto a los adultos.

Entrenamiento de fuerza durante el crecimiento.

En niños sin patologías y que lleven una correcta alimentación, no hay ninguna evidencia científica en la cual se demuestre que un tipo especifico de actividad física pueda alterar su normal crecimiento, desarrollo o maduración. De hecho, la realización de estos entrenos estimula el desarrollo óptimo en durante el crecimiento y la maduración.

Consideraciones a tener en cuentas

Entre los 6 y 12 años, el músculo esquelético del niño es mas elástico, con poco tono y definición. En cambio, en esta etapa se predispone para realizar trabajos aeróbicos o esfuerzos intermitentes. También poseen una gran movilidad, huesos largos y flexibles. Por este motivo los ejercicios tienen que ir enfocado a la musculatura del core (abdomen, glúteos, isquios o cuádriceps) y, no tanto, a la de las extremidades (Bompa, 2003).

Entre los 12 y 14 años, los niños tienen más riesgo de lesionarse, por el crecimiento “sin control” y por el incremento de la testosterona, hormona del crecimiento. Esto incrementará significativamente la ganancia de fuerza y masa muscular, aunque decrecerá la coordinación. Esto aumenta el riesgo de lesión, haciendo una comparación con las serpientes, en esta etapa el adolescente muda la piel y se tiene que adaptar, en el transcurso de ese tiempo la musculatura está mucho más expuesta.

¿Cuáles son los beneficios?

  • Ganancia de fuerza
  • Efectos positivos sobre composición corporal 
  • Perfil lipídico 
  • Glucemia sanguínea 
  • Densidad ósea 
  • Aspectos Psicológicos 
  • Mayor predisposición a elegir actividades energéticas (deporte) respecto a otras más sedentarias (Faigenbaum 2006, Watts et al 2005)

Todas estas mejoras se producen más significativamente en las primeras semanas de entrenamiento, donde predominan los aspectos técnicos y coordinativos, mientras que, en las siguientes semanas, las ganancias son menores, pero igualmente importantes.

En el momento en el que se deja de entrenar, las pérdidas de fuerza son bastante significativas.

El entrenamiento de fuerza en esta etapa, ayuda a predisponer al organismo a un menor riesgo de lesiones en el futuro, así que, podemos decir, que el objetivo de esta etapa es preparar al organismo con un grado alto de experiencia motriz y que, este aprendizaje, sea de manera progresiva.

Incidencia de lesiones en niños y jóvenes

Los niños que realizan entrenamiento de fuerza utilizando ejercicios multiarticulares, incluso levantamientos olímpicos, tienden a reducir la incidencia en lesiones.

Entre un 15% y un 50% se podrían prevenir con un programa de fuerza adaptado alas necesidades del niño.

Este es el aspecto que podríamos mejorar en Élite Málaga, así como ayudar a nuestros adolescentes a no tener que pasar por el trago de una lesión innecesaria.

Para terminar este post nos gustaría ofrecer dos aportaciones claves:

  • En primer lugar, tendríamos que hablar de especialización temprana. Para nosotros la especialización temprana es un error muy grave que se suele cometer en los niños, para una correcta evolución del niño, este debería practicar mas de un deporte, para adquirir las capacidades coordinativas de cada uno de ellos. Por ejemplo, los niños de 6 años que practican un solo deporte tendrán deficiencias coordinativas en la adolescencia, por esta razón desde Élite Málaga recomendamos la práctica de multi-deporte.
  • Como dato anecdótico, haciendo referencia al deporte de alto rendimiento, los jugadores mejor posicionados en el draft de la NBA, son niños que han practicado multideporte desde edades tempranas. Una especialización temprana no está justificada en ningún caso.

Si eres padre o madre de algún adolescente y tienes dudas sobre el tipo de actividad física que puede realizar tu hijo/a no dudes en ponerte en contacto con nosotros en este formulario o vía WhatsApp 656 50 13 17 y nuestros especialistas te asesorarán sin compromiso.